El Sub-consciente, tus células y emociones
Si comparamos nuestra mente con un témpano de hielo, la superficie podría ser nuestra mente consiente y racional. La otra parte que está debajo, representa nuestro sub-consciente, y es desde ahí de donde en realidad estamos operando nuestro sistema, nuestro cuerpo y comportamientos. Muchas personas no han descubierto esto porque nunca han considerado que hay algo más allá de nuestra limitada mente consciente. Nunca se han sumergido debajo de su ser para poder apreciarlo, por tal razón desconocen su potencial. Nuestro maravilloso subconsciente tiene la capacidad y la información para educarnos y llevarnos de la mano para resolver muchos conflictos y enfermedades que sufrimos.
Lamentablemente, hemos desarrollado la creencia de que muchas cosas son imposibles porque dentro de nuestro entendimiento de cómo funcionan las cosas, no existen esas posibilidades. Qué tal si yo te dijera que puedes remover el dolor que estás sufriendo en tu cuerpo ahora mismo.
¿Me creerías? ¿En tu mente racional es posible remover ese dolor en este momento para siempre? ¿Aún cuando sea un dolor de más de 10 años y después de ver más de 5 especialistas? ¿Tú crees que pueda ser posible? Para muchas personas yo sé que piensan que no puede ser posible, que el dolor es parte de la vida, que eso es normal con la vejez. Pues mi amado amigo lector, yo quiero que sepas, aunque no lo creas, aunque no estés de acuerdo conmigo es posible liberar los dolores al momento.
Te invito a que pienses al mirar a las personas como si cada una incluyéndote, estuvieran llevando en sus espaldas varias maletas. Esas maletas simbolizan los diferentes traumas emocionales que has pasado como por ejemplo, abandono o abuso que generaron emociones negativas que con mucha posibilidad estén atrapadas en tu cuerpo.
Es lo que descubrió el Dr. Bradley Nelson, autor del libro El código de la emoción y nos explica:
“La gente suele sentir que tienen problemas emocionales, pero no saben cómo ir más allá de ellos. Los sentimientos que parecen estar en su camino son a menudo debido a sus emociones atrapadas. Por lo general, son asombrados al descubrir que sus equipajes emocionales a menudo consisten en energías discretas que quedaron atrapadas durante los eventos emocionales que experimentaron en su pasado. Son aún más sorprendidos al ver la facilidad con que estas energías pueden ser encontradas y eliminadas, y por lo diferente que se sienten cuando son liberados de ellas.
De la misma manera que no se puede ver el viento, pero se puede sentir sus efectos con su fuerza poderosa, las emociones atrapadas pueden afectar físicamente al igual que mental y emocionalmente. En mi experiencia, el 95% de las enfermedades físicas, dificultades emocionales y autosabotajes son causados por estas energías invisibles emocionales.
El Código de la Emoción ha sido creado para darle una nueva visión a las enfermedades, para mostrar cómo las emociones atrapadas pueden causar todo tipo de problemas, y le dará los medios para ponerlos en libertad. Usted puede tomar su vida de nuevo, disfrutar de una mejor salud, y finalmente ser libre de las fuerzas insidiosas y sutiles que las emociones atrapadas están ejerciendo sobre usted”.
Para explicar cómo las emociones negativas y el estrés van saturando nuestro cuerpo a través de los años podríamos utilizar como ejemplo 5 vasos de agua. El primero es cuando tenemos 10 años de edad, casi vacío, pero en aumento, ya a los treinta años el vaso esta por la mitad, pero a los 50 años el vaso esta desbordado. Aquí es cuando los dolores comienzan a aflorar, lo cuales llamamos culturalmente: achaques. Esto no quiere decir que algunas personas no llenen sus vasos antes de esa edad, pero por lo general es a los 50 años en adelante que comienza los dolores más fuertes.
El subconsciente es 1,000 veces más poderoso que nuestro igual consiente - Tor Norretranders
¿Así que, si nuestro subconsciente es tan poderoso, quién lo controla?
Es una excelente pregunta, el subconsciente lo controla usted. La diferencia es que no es lo mismo controlar algo sin saberlo, que saber usted que controla algo. En otras palabras, es la conciencia la diferencia, porque la energía se concentra en donde usted ponga su enfoque e intención. La intención lo es todo, es la gran diferencia entre el castigo o el perdón.
Si usted tiene un accidente de auto donde muere una persona y fue usted quien provocó el accidente porque su auto se quedó sin freno, usted no tuvo culpa porque no fue su intención matar a una persona, fue un accidente por una falla mecánica. Entonces usted no irá a la cárcel, una gran diferencia si usted en un acto de ira, le tira el auto encima a la persona atropellándola y ocasionándole la muerte. Así que, guiamos este vehículo llamado cuerpo por toda una vida, sin saber que no lo estamos conduciendo a plenitud. Sin la conciencia de que tenemos mucha más participación y efecto en nuestras vidas y nuestro entorno de lo que jamás hallamos imaginado.
Cada vez más el ser humano descubre que lo escrito hablado por nuestro creador, y dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; nos sigue sorprendiendo. No tengo duda de que podemos hacer cosas espectacularmente grandiosas e increíbles, solo que sencillamente no tenemos el entendimiento en este momento. Pero sin duda, me atrevo a decir que están bien cerca los días en que muchas cosas comiencen a cambiar. Donde el ser humano haga cosas que hoy se consideren milagros y las veamos suceder cotidianamente. El subconsciente vive y se expresa dentro de cada una de nuestras 50 trillones de células.
Quiero que tomes en consideración que cada uno de nosotros se formó desde una sola célula, y esa sola célula tiene toda la información de todo nuestro cuerpo, tamaño, color, aspecto, y no necesita de ninguna intervención de nosotros para
crearnos.
Todo está dentro de la célula, la plantilla de cada tejido, cada órgano, cada vena, cada glándula, todo resuelto para entregarnos un cuerpo sin ningún costo para que puedas experimentar esta experiencia que llamamos vida. Así que en cada célula esta toda la codificación de tu ser, que a su vez fue creada por la unión, información y energías de las células de tus padres, que crearon una nueva célula donde heredas las emociones y sentimientos que ellos sintieron en su experiencia por la vida.
Lamentablemente, creemos que la buena herencia es aquella donde la persona recibe una gran fortuna económica. Ahora la ciencia ha logrado confirmar que todas esas energías incluyendo las de emociones sean positivas o negativas, todo lo que pensaste e hiciste, se va grabando en tus células en una especie de disco duro llamado ADN. Por eso, Dios nos llama a ser buenos, a hacer el bien, a vibrar en amor, a ayudar al prójimo, a ser responsables y organizados, así como lo es el universo que él ha creado, para que seamos compatibles con su creación y de esa manera podamos fundirnos en uno.
Donde todo es organizado, donde los patrones que forman la vida son para bien y para crear más vida. El día, la noche, la semilla, la lluvia, el verano el invierno el mar, el río, el fruto, el animal, el insecto, la bacteria, el humano, todo en un orden hermoso, compatible y organizado.
Así que si haces el bien, quedará grabado en tus células y tu simiente no será de víbora sino de bien. Cuando engendras las experiencias tuyas y las de tus padres, caen sobre tus hijos especialmente las de amor porque son energías de una frecuencia que inclusive pueden mejorar el ADN. Por tal razón, si descubres a tu subconsciente, y cómo tus células y su inteligencia funcionan, comenzarás a caminar sobre una nueva dimensión.
Descubrirás la entrada de un portal mágico donde la entrada está dentro de ti, búscalo y lo encontrarás, lee, llama, escudriña, conversa con tu corazón y veras días hermosos llenos de esperanza, de salud, de felicidad, de prosperidad. Háblale a tus células, con amor y plena conciencia, es fácil y gratuito como todo lo creado por el universo. ¿Quieres sentir a tus células y a tu subconsciente hablándote? Apaga toda distracción, televisor, radio, celular, etc.… párate derecho y cierra tus ojos. Relájate, nota que tus hombros caen hacia abajo. Respira profundo, has silencio en tu mente y deja que el cuerpo oscile hacia delante o hacia atrás. Pregúntate si tu nombre es; y vas a decir el de otra persona no el tuyo. El cuerpo debería moverse para atrás, ahora pregúntale si tu nombre es y menciona tu nombre verdadero, el cuerpo debería de moverse hacia el frente.
Si tienes deshidratación, una desviación en la columna o una emoción atrapada sobre algún meridiano podrías experimentar que el sí sea al revés, o sea para atrás y el no hacia el frente. Compártelo y si quieres saber o aprender más sobre el código de la emoción y de cómo puedes liberarte de todo tu equipaje pesado, contáctame en Facebook bajo Habacuc Cardona.